“La gota horada la roca, no por su fuerza sino por su constancia.”
Ovidio (43 AC-17) Poeta latino
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Rosario Palomo Arrojo
MIS ÍTACAS
Mis comienzos como maestra fueron en Sevilla, tres años, tras los cuales vuelvo a Extremadura, a Vva de la Serena, Badajoz, para ya no moverme de ella.
Maestra de lo que era entonces 6º, 7º y 8º de EGB (4 cursos); maestra de Educación Infantil (7cursos). Entonces no se necesitaba especialización, era la última en el centro y ¡me tocó!, Pero fue una de mis mejores experiencias.
Logopeda (3 cursos) adscrita al Equipo de Orientación de Villanueva de la Serena, durante tres cursos, allá por el año 1985, cuando comenzaba la integración. Uno de los 6 primeros logopedas de la provincia.
Estos años como maestra me permitieron conocer la práctica educativa en el aula. ¡Cuánto aprendí en esta etapa!.
Desde 1994, Orientadora en el EOEP de Villanueva de la Serena al que tuve la suerte de dirigir durante unos años: buscar acuerdos, compartir, colaborar en el desarrollo de la profesión, lograr un equipo envidiable, puntero, cohesionado…. Esas eran nuestras señas de identidad.
No puedo olvidar mi paso por la administración, como Jefa de Servicios de Atención a la Diversidad, en la entonces Dirección General de Calidad y Equidad educativa (2005-2008), otra parte de mi vida profesional, importante sin duda y de gran aprendizaje, porque fue una suerte poder ver la educación desde una perspectiva más amplia.
En 2008 volví a mi Equipo de Vva. Mi Ítaca final. Una etapa tranquila, entrañable, con muy buenos momentos, con muy buenas personas a mi alrededor, con muy buenos compañeros que me han enriqueciendo tanto profesional como personalmente.
Estoy agradecida por todo lo que he recibido de las personas que a lo largo de mi vida profesional me han acompañado. He puesto en juego mi saber personal y profesional, he conjugado en ella mis deseos, mis expectativas, mis desvelos y mis alegrías. Llego al final con la satisfacción de haber dado todo lo mejor de mi. También orgullosa de haber aportado mi granito de arena a los demás y a la Educación.
He tenido una vida profesional bastante buena y bastante rica. Han sido casi 39 años de trabajo, viajando en busca de mi Ítaca. Camino largo, lleno de aventuras, lleno de experiencias. Me he apropiado de hermosas mercancías, y de abundantes perfumes y aromas, he aprendido de todos los sabios con los que me he topado, y ahora ya, enriquecida de cuanto he ganado en el camino, atraco en esta Ítaca, agradecida de cuanto este hermoso viaje me ha brindado; pero…mi camino continúa, ¡debo seguir buscando otras ítacas!.
Deseo que en esta nueva etapa, cultivar nuevas ilusiones, emprender nuevos e ilusionantes proyectos, disfrutar, junto a los míos, llevándolos a cabo, con tranquilidad, sin prisas, a un ritmo acompasado, siempre adelante, siempre avanzando, mejorando, disfrutando.
