“No existe nada bueno ni malo; es el pensamiento humano el que lo hace aparecer así.”
William Shakespeare (1564-1616) Escritor inglés
1982 termina magisterio y, ese mismo año, en el colegio donde hizo las prácticas, es contratado para sustituir al jefe de estudios.
Bien porque ya conocía a los alumnos, bien porque gustó en el centro su forma de trabajar y su compromiso (él prefiere pensar que por lo segundo) trabaja unos meses en el colegio concertado Monserrat de Madrid.
1983 Saca las oposiciones y la inspectora le propone incorporarse de manera inmediata a un proyecto piloto de Educación Compensatoria en un barrio "difícil" de Madrid, Horcasitas.
Desde este momento toma conciencia de que la educación es una profesión apasionante. Así la vivirá sus 35 años de ejercicio.
Desde este momento recibe formación para extender en su ambito las ideas base del Libro Blanco para la Educación que dio lugar a la LOGSE.
1985, se afilia al MRP (Movimiento de Renovación Pedagógica) MCEP y a su extensión internacional FIMEM de inspiración freinetiana.
Además de trabajar en los distintos destinos que ha tenido, dedica gran parte de su vida personal a la labor de extender la pedagogía Freinet por España, Francia, Finlandia, Bulgaria e Italia. 25 años de militancia activa en la "Utopía" de Cambiar el mundo desde la Escuela.
Distintos destinos que le dan una perspectiva amplia de los ámbitos reglados de la educación: desde infantil al instituto, adultos, universidad, escuela de padres, formación del profesorado,...
Trabaja sin libros de texto durante 20 años en coherencia con su práctica de una escuela nueva en la que asamblea, texto libre, cálculo vivo, correspondencia escolar, escuelas de padres, tutorización entre iguales, abrir la escuela al entorno,...crean un clima de verdadero crecimiento para todos los que participan. Niños, maestros, padres y adultos del entorno.
Una profesión y una vocación, una manera de tener un salario y un compromiso con el ser humano. Una vida apasionada con mucha dedicación, con muchos momentos bellos y emocionantes, muchos encuentros con seres humanos entrañables ... algunos difíciles.
Ver a los alumnos/as, compañeros y padres como seres humanos. Consciente de que una palabra, un gesto, una actitud NUNCA es neutra, o ayuda y favorece o... lo contrario.
Cada día un nuevo propósito de mejorar, de hacer de él un día con sentido, ha sido un motor para afrontar las dificultades que la vida nos pone a cualquier persona.
¿Un consejo para los que siguen?
Saber que un punto de reflexión compartido alivia las dificultades que se presentan.
Un anhelo de mejora cada día.
Recordar que esta profesión nos pone en contacto constante con seres humanos con la responsabilidad que conlleva.
Cándido Medina Díaz. Maestro